Go villanos! - Entrevista Kaboré (1ª Especial)

1ª NOTICIA ESPECIAL - 6ª TEMPORADA​

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“En el Internacional no pude disfrutar de la profesión de futbolista”​

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Kaboré vuelve a sonreir tras las putadas constantes que recibía en el vestuario de su antiguo equipo.​

“Tuve un percance con Lloris en el vestuario por no bajar a defender"​

“Me molestó que Alfonso hablase mal de mis compañeros”​

Alberto Gómez / SALAMANCA
Kaboré, a sus 22 años, se muestra confiado en que la mezcla de experiencia y juventud que existe en la plantilla del Aston Villa les devolverá a la senda de los éxitos. Un 7 de noviembre lluvioso, después de ganar al que era su equipo en su estadio, nos recibe en su piso de Birmingham. Detallista fuera y dentro del campo, nos prepara un aperitivo y nos invita a sentarnos en un amplio salón decorado con recuerdos de grandes tardes de fútbol en forma de fotografías.
En tus 4 años de carrera como futbolista profesional, ¿alguna vez se te han cruzado los cables en un vestuario?
Bueno, te va a parecer un tópico, pero tengo que decirte que yo siempre he intentado llevarme bien con cualquier compañero de equipo, sea joven o viejo, mejor o peor jugador, cobrase más o menos… Aunque una vez que me recriminaron el no bajar a defender sí que tuve que responder de la mejor manera posible y se creó una situación un poco tensa.
¿Fue en el Internacional donde tuviste ese pequeño percance?
Sí, nos estábamos jugando mucho y eso se reflejó en nuestras actitudes, hasta el punto de tener que vivir alguna situación indeseada como esa. Pero el míster pronto calmó el ambiente. La verdad es que prefiero no hablar de eso.
Cuéntanos cómo fueron tus inicios… Aquel joven jugador que fichó por el equipo brasileño apuntaba a estrella, ¿faltó ambición para acabar en un grande?
No… mira. Yo cuando iba viendo cómo evolucionaba como futbolista me iba dando cuenta de que esta profesión podía solucionarme la vida, pero no me lo tomé de forma ambiciosa. Simplemente quería disfrutar haciendo mi trabajo, y cuando fiché por el Internacional pensé que allí iba a poder hacerlo.

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¿Y por qué no pudiste?
Las circunstancias de entrenadores, presión de la afición, yo era demasiado joven, el desgraciado del entrenador… Ese club es muy complicado. Muchos jugadores se han perdido ahí. Tuve la opción del Aston, que era un club en progresión, lleno de optimismo… Y hasta ahora.
¿Hasta qué punto han llegado a afectarte moralmente las lesiones sufridas?
Puf… (suspiro) Si me dicen en la primera rotura que tuve que después me iba a lesionar en tantas ocasiones… O lo hubiera dejado o directamente no me lo hubiera creído. La gente piensa un momento “pobre chico”, pero lo fastidiado es vivirlo. Levantarte tantos días sabiendo que el sábado no juegas… Para mí ha sido muy duro, sobre todo la primera fase de cada lesión, hasta que puedes hacer ejercicio físico. Incluso llegué a pensar en dejarlo.
¿Qué te hizo salir adelante?
La gente. La afición es la que me da ánimos. Por eso tengo la misma ilusión que el primer día. Al final merece la pena vivir cada minuto en el campo, aunque haya sufrido tanto tiempo fuera del mismo.
¿Crees que la ruptura entre la afición y el míster Alfonso puede deberse, en parte, a tu continua suplencia cuando él era técnico?
No, no creo que eso sea así del todo. Sé que la gente me tenía cariño, y yo intenté devolvérselo, pero el Internacional estaba por encima de cualquier jugador. Está claro que no he jugado todo lo que hubiera querido, pero no creo que estuvieran molestos por eso…
Te lo pregunto de otra manera, ¿piensas que el estilo de juego de Alfonso no era muy acorde a tus cualidades?
Bueno, puede ser… Sé que soy un jugador con funciones muy específicas, y hoy en día se lleva el futbolista ‘multiusos’, que vale para todo. El míster hizo una apuesta por dejar la portería a cero y a partir de ahí intentar conseguir algún gol y, bueno, a veces salía bien y otras no tanto. La afición estaba acostumbrada a un juego de ataque, de dominio, y a ver muchos goles durante el año.
¿Te molestó que Alfonso ‘rajase’ de ex compañeros tuyos como Agbonlahor o Negredo?
Hombre… me molesta que se hable mal de cualquier compañero. La verdad es que jugadores que lo han dado todo por ese escudo no se merecen recibir esas declaraciones. Pero cada uno es libre de opinar y el tiempo pone a cada uno en su sitio.

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Esa situación tensa que has querido resaltar, ¿fue con Alfonso en el banquillo?
Sí… bueno, fue un partido en el que nos jugábamos el meternos en puestos de descenso. Lloris, un gran profesional, era el encargado de dirigir la defensa y nos estaban desbordando en la primera parte. Él pidió más ayuda defensiva, íbamos 0-0 y el empate parecía que no era del todo malo, así que hicimos un cambio en el que salí yo y el míster dio entrada a un medio centro defensivo. Pero prefiero no hablar más de ello.
Por último, nos gustaría conocer tu visión del futuro próximo y lejano en tu carrera profesional.
Está claro que este es un año ilusionante para mí. Me haría mucha ilusión dejar al Aston en puestos europeos de Primera, que es donde se merece. Estamos trabajando duro para ello y tenemos un entrenador de un gran nivel, moderno, abierto y con un trato excelente hacia los jugadores. Por no hablar de la afición. Es increíble la cantidad de gente que acude al estadio, eso no pasa en ningún campo de España.
Respecto al futuro lejano… (risas) firmé un contrato de cuatro años y espero asentarme aquí. Alberto ha sido como un padre para mí y se lo debo todo. Estaré encantado de ayudarle a que el proyecto del Aston prospere. Si conseguimos quedar en buena posición y avanzar en la Copa yo creo que podemos considerar la temporada como un éxito.